El Museo reabre todos los días del 12 de diciembre al 10 de enero
Aprovechando la flexibilización de las medidas de limitación de la movilidad establecidas por la Junta de Andalucía desde mañana
Aprovechando la flexibilización en las restricciones de la movilidad establecidas por la Junta de Andalucía, el Museo Internacional de Arte Belenista de Mollina (Málaga) vuelve abrir sus puertas a partir de mañana sábado, 12 de diciembre.
Este centro cultural único en el mundo, se vio obligado a cerrar el pasado 30 de octubre, tras establecerse el cierre perimetral de Mollina, al imposibilitar que fuera posible que todas aquellas personas procedentes de otros municipios pudieran visitarlo. Con los nuevos permisos de movilidad se abrirá todos los días de la semana hasta el 10 de enero. La intención es tener un horario de 10:00 a 14:00 y de 15:30 a 19:30 horas. Sin embargo, en el caso de que la nueva orden o decreto de la Junta de Andalucía aplicable desde mañana no permita un horario más amplio al vigente para museos y espacios culturales, se cerrará cada día a las 18:00 horas. Independiente de lo anterior, para los días 24 y 31 de diciembre sí se ha fijado un cierre a las 18:00 horas.
La Fundación Díaz Caballero, promotora del Museo Internacional de Arte Belenista, se muestra muy satisfecha de que amantes del belenismo y demás visitantes puedan volver a recorrer las salas de este museo, que cuenta que cuenta con más de 100 belenes y dioramas y unas 2.000 figuras expuestas en sus siete zonas expositivas, además de una muestra temporal de la Pasión de Jesús.
“Nos alegra enormemente que el museo pueda volver a abrir para seguir recibiendo a nuevos visitantes y muchas otras personas que cada año o cada cierto tiempo les gusta contemplar nuestros belenes. Y más, que lo podamos hacer en pleno Adviento, en unas fechas en las que son muchas familias las que han montado recientemente su belén o lo harán en próximos días. Este centro también nació para dotar al arte belenista de un espacio privilegiado para su exposición y conservación, pero también para promover el belenismo”, ha declarado Antonio Díaz, presidente de la fundación.
Desde la entidad también son conscientes que la reapertura del Museo Internacional de Arte Belenista puede ayudar a incentivar las visitas al municipio de Mollina y la comarca de Antequera, contribuyendo así, en la medida de lo posible a la llegada de turistas que consuman en su hostelería y compren en sus establecimientos. Por el momento y hasta el próximo día 17 sólo podrá venir a este centro cultural vecinos de otros municipios de la provincia de Málaga. Sin embargo, a partir del próximo viernes, 18 de diciembre, en la segunda fase esta desescalada temporal, ya lo podrán hacer residentes de toda Andalucía, pudiéndose retomar las vistas de muchos amantes del belenismo que llegan desde toda las provincias andaluzas.
En este sentido, se recuerda que, debido a la rebaja del nivel de alerta sanitaria aplicada al municipio de Mollina desde mañana -se pasa del nivel 4 al 3- estará permitido un aforo máximo del 65% para cada una de sus salas y espacios públicos. Además, las visitas de grupos serán de un máximo de 15 miembros, incluida la persona que haga de guía, debiendo establecerse las medidas necesarias para procurar la distancia de seguridad interpersonal durante el desarrollo de la actividad.
De cara a esta nueva reapertura se han tomado todas las medidas de limpieza y desinfección que se recomiendan por las autoridades sanitarias. Asimismo, hay cartelería con indicaciones higiénico-sanitarias, señalización de accesos a las salas, se han sustituido las pantallas multimedia informativas táctiles de cada uno de los belenes por fotografías explicativas y hay dispensadores con gel hidroalcohólico.
Desde su apertura hace poco más de tres años, más de 120.000 personas han pasado por el Museo Intencional de Arte Belenista, ubicado en el Polígono Casería del Rey de Mollina. Como complemento a esta colección única en el mundo, los visitantes también pueden ver en el patio exterior dos almazaras de aceite, aperos de labores agrícolas y cómo eran algunas estancias de una casa popular andaluza, tan típica de la comarca de Antequera.